miércoles, 6 de mayo de 2015

III Concurso de Relatos Cortos de Playa Blanca, "El mundo de los cuentos" Primer premio Infantil


Continuando con la publicación de los relatos ganadores, hoy toca el ganador de la categoría Infantil, que ha recaído en el relato "El mundo de los cuentos" de la estudiante de del CEIP de Playa Blanca, Llara Montequín. Esta joven escritora nos lleva a los cuentos de toda la vida y nos recuerda lo importante que es leer y transmitir el amor de la lectura a los peques.


El mundo de los cuentos

Marcos era un niño al que no le gustaba leer, ni estudiar, tampoco hacer deberes. Sus
profesores le decían a su madre que era un chico con un gran potencial pero no sabía 
desarrollarlo, sus padres pasaban poco tiempo en casa por su trabajo y él tenía
demasiada libertad para tener solo once años. Siempre que ella iba a una reunión los
profesores le decían lo mismo, cuando llegaba a casa se iba a su habitación a llorar de 
impotencia pero ese día sería distinto:



-¡Marcos! Ven a aquí - le grito su madre, dejando sus llaves encima de la mesa de la cocina.
Volvió a girar su mirada hacia las escaleras, al no sentir ningún ruido, subió al segundo 
piso y abrió la puerta de su habitación, estaba como siempre tirado en la cama jugando 
con la play , con los cascos puestos escuchando ese horror de música que él llamaba 
heavy metal, marcos giro la cabeza y vio a su madre roja como un tomate, con una 
cara de ira que nunca había logrado ver, se asustó un poco, se quitó sus cascos negros 
como el azabache, ella muy enfadada le dijo que estaba castigado y el sin mover una 
sola pestaña, le pregunto el por qué, pero ella le contesto:



-No tengo porque darte explicaciones, bueno si, estas expulsado tres días del colegio dijo 
cerrando la puerta con un gran golpe a sus espaldas pero.., aún no había acabado:



- ¡ponte a estudiar ahora mismo o lee pero haz algo ¡

Marcos se quedó solo en su habitación, rodeado de los libros de clase los cuales nunca 
había abierto ni la primera página, ya que ningún libro del colegio le gustaba, se puso a 
dar vueltas y vueltas por la habitación, cuando se iba a volver a sentar en su cama vio un 
pequeño baúl en la esquina de la habitación donde tenía guardados sus juguetes de 
cuando era pequeño, al abrirlo encontró sus viejos cuentos pero eran aburridos esas 
cosas eran de bebes además estaban muy gastados, y el muy cansado, se durmió cobijado 
entre todos los cojines y mantas que tenía tiradas por el suelo, entro en un sueño 
profundo… el mundo de los cuentos.



Estaba en un bosque muy oscuro con muchos árboles y todo tipo de plantas, había caído 
junto un agujero que parecía ser la madriguera de un conejo aunque de el salió una 
mariposa, empezó a caminar por un sendero con muchas pisadas de personas y
animales, caminaba y caminaba pero todo el paisaje era el mismo hasta llegar a un claro 
donde se veía a lo lejos un pequeño pueblo, había grandes palacios y jardines a su 
alrededor pero parecían estar muy sucios y desgastados quizás por el paso del tiempo, 
con cara de asombro siguió caminando , por sus estrechas calles pudo ver a lo lejos a 
una joven que iba acompañada de siete hombrecitos ¡ no podía ser, era blanca nieves y 
los siete enanitos, ¡Eran ellos estaban allí ¡ Marcos se sorprendió pero no le dio mayor 
importancia ya que como él decía los cuentos son de bebes, le parecían historias 
absurdas y sin sentido, cuando ya se iban acercando se dio cuenta de que estaban muy 
tristes, toda su ropa estaba sucia incluso la tiara de la preciosa princesa estaba 
destrozada, se acercó a él le miro, sus ojos estaban llenos de tristeza y no se atrevió a 
decirles ni una sola palabra se quedó sentado en una piedra viendo cómo se alejaban, 
después de unos cuantos minutos pasaron pulgarcito y pinocho seguido de los tres 
cerditos que iban de la mano de cenicienta, antes de que se fueran les pregunto qué 
ocurría, porque estaban tan tristes, ellos se acercaron a él y poco a poco todo el pueblo 
formo un corro, el príncipe azul y campanilla salieron de una esquina, comenzaron a 
hablar .


-Nos estamos muriendo - Marcos se alarmo y rápidamente pregunto el porqué:

-Desde hace tiempo, los niños ya no leen cuentos, se pasan el día jugando a las
maquinitas, hablando por el móvil y viendo la tele, como puedes ver todos somos
personajes de cuentos y ya se están olvidando de nosotros por eso estamos
desapareciendo y acabaremos muriendo.

-
De repente mientras que escuchaba lo que campanilla le decía apareció entre aquella
muchedumbre el gato con botas cuando le vio recordó que era su personaje favorito de 
cuando era más pequeño al verle se puso muy triste ya que tenía la mirada perdida, sus 
botas estaban desgastadas, su sombrero estaba rajado por todas partes y su espada le 
había desaparecido en ese momento comprendió que si seguía así todos esos personajes 
que tan buenos recuerdos le traían a la mente, desaparecerían...



-Pero eso no puede ser, no podéis desaparecer, algo se podrá hacer – grito el niño .-
claro, si todos los niños volviera a leernos volvieran a recuperar esos momentos de
lectura, quizás …..- pero cuando se disponía a contestarles todo lo que había a su
alrededor se volvió negro, entendió que tendría que volver a casa, se despertó en su
habitación entre aquellos cojines en los que hace unos minutos se había dormido se
levantó rápidamente y cogió todos esos libros que había dejado olvidados hace unos
años, los empezó a leer, aunque le costaba ya que nos se veían bien porque estaban
muy gastados y sus dibujos estaban desapareciendo, recordó lo que le había dicho
campanilla, cuando su madre volvió a entrar en la habitación, marcos ya se había leído 
todos los cuentos y ahora le estaba enseñando su favorito a su hermana, había hecho 
todo lo que le había mandado y sus cuentos volvían a tener color, ella se sorprendió y le 
dio un gran abrazo a su hijo. Desde ese día Marcos se encargaba de leerle un cuento 
cada noche a su hermana pequeña.



Llara Montequín